Rodolfo González Oga, militante Marplatense secuestrado desaparecido en 1976.

    Secuestrado desaparecido el 27 de octubre de 1976 a los 21 años de edad.

    Todos lo conocíamos por Fito el del Correo.
    Según cuenta su hermana Marta, Rodolfo vivía con una tía hermana de su padre, cerca de Rawson y Jara. Su madre había fallecido y su padre se había vuelto a casar lo que motivó que tanto Fito como su hermana que no aceptaban la nueva situación vivieran con parientes cercanos
    Rodolfito estudió en la Escuela Comercial Provincial de la calle Hipólito Irigoyen al 1300.
    Para poder trabajar, continuó los estudios en la nocturna.
    Al igual que su padre, estaba empleado en el Correo Central de Mar del Plata, de Av. Luro y Santiago del Estero, como cartero, de ahí su apodo.
    Era militante de la Juventud Socialista de Avanzada y dada la situación política de entonces, y que estaba cumpliendo el Servicio Militar Obligatorio, no tenía militancia activa dentro de la escuela.
    En días anteriores a su secuestro Fito había sido licenciado por lo que en esos momentos tenía el pelo muy corto.

    El 27 de octubre de 1976, sobre las 5 de la tarde, estaba citado en un Bar próximo a su trabajo con Patricia Gaitán, al objeto de ser informado de la persecución que se estaba desatando.
    Rodolfito estaba con el uniforme para ir a trabajar ya que él entraba a las seis de la tarde.
    La reconstrucción de lo sucedido desde el secuestro de Norma Huder haste ese momento nos lleva a conjeturar que Paty estaba siendo vigilada en sus movimientos por elementos de la FORTAR 6, los cuales también estaban controlando el domicilio del cual salió Patricia, para acudir a esa cita.
    La vigilancia de ese domicilio, permitió al día siguiente lanzar el operativo que daba comienzo al secuestro de militantes y simpatizantes de la J.S.A. del P.S.T.
    Hay constancia a través de un compañero liberado de su estadía en el C.C.D. Base Naval Mar del Plata. (LINK a declaraciones)

    El padre al no tener noticias de él, comienza a preguntar por los bares del centro de la ciudad, llegando hasta la Plaza Luro donde en el bar “La Ponderosa”, le cuentan que militares uniformados habían detenido a dos chicos y una chica, y que se los había llevado a los tres.
    Su padre tenía un amigo que, era militar y prestaba funciones en el GADA, el cual se negó a darle ningún tipo de información. Por lo que se dirigió personalmente al GADA 601 donde le respondieron que ahí no estaba su hijo, amenazándolo de que si seguía buscando a Rodolfo, iba a desaparecer él también. Poco tiempo después notó que cuando salía a trabajar, había un auto de civiles parado en la puerta que lo vigilaba.
    Marta, su hermana no se enteró hasta después de un tiempo que Fito había sido secuestrado, cuando un día por causalidad se encuentra con un primo que le pregunta “Tu hermano apareció?”. Entonces llama a su padre al correo para que le contase lo que había pasado, creemos que para protegerla del dijo: “Callate la boca que Fito está bien”. Tal era el temor de su padre, tal vez aconsejado por su “amigo militar”, que al objeto de proteger a sus hijos, nunca denunció la desaparición de Rodolfo.